Los destellos (2024)

En el crepúsculo de su vida, Isabel enfrenta un dilema que trastoca su tranquila rutina cuando Madalen, su hija, le formula una petición que resuena con ecos del pasado. La solicitud de visitar regularmente a Ramón, su exmarido ahora postrado por una enfermedad degenerativa, despierta fantasmas que creía enterrados. La trama se desarrolla en un escenario urbano contemporáneo donde los recuerdos se entrelazan con la cruda realidad del deterioro físico, explorando cómo las relaciones fracturadas pueden resurgir en momentos de vulnerabilidad. A medida que Isabel inicia estas visitas obligadas, descubre que la enfermedad ha transformado al hombre arrogante que una vez conoció en una sombra vulnerable. Cada encuentro en la habitación de hospital, impregnada del aroma antiséptico de la enfermedad, se convierte en un viaje al corazón de las contradicciones humanas. Los destellos de su vida matrimonial resurgen entre silencios incómodos y confesiones inesperadas, revelando verdades que habían permanecido ocultas bajo capas de resentimiento. El drama se intensifica cuando Isabel comienza a cuestionar sus propias memorias, mientras Ramón lucha por articular pensamientos que la medicación nubla. La narrativa profundiza en la complejidad de cumplir con obligaciones morales hacia quien causó dolor, y cómo estos encuentros forzados desvelan matices inesperados en su historia compartida. A través de escenas cargadas de tensión emocional, la obra examina si es posible encontrar redención en los momentos finales, y cómo el cuidado de un ser vulnerable puede transformar incluso las heridas más profundas..