Perspectiva (2024)

En un horizonte tecnológico inminente, la barrera entre el presente y el mañana se desdibuja gracias a LookApp, una innovación revolucionaria que proyecta escenarios futuros basándose en los patrones mentales y memorias de sus usuarios. Esta interfaz cognitiva, impulsada por una inteligencia artificial sin precedentes, genera proyecciones vitales que prometen orientar las decisiones cotidianas hacia resultados óptimos. Aunque las estadísticas alertan sobre el creciente índice de dependencia psicológica y las consecuencias neurológicas irreversibles entre sus seguidores, Aarón cruza el umbral de lo prohibido movido por una sospecha corrosiva: la posibilidad de que su compañera sentimental mantenga un vínculo clandestino con su propio confidente. La narrativa se desarrolla en entornos urbanos impregnados de realismos aumentados, donde las predicciones digitales se superponen a la realidad tangible como capas de potencialidad distorsionada. A medida que Aarón se adentra en este ecosistema de futuros probables, descubre que las visiones proyectadas por la aplicación contienen anomalías deliberadas – fragmentos temporales que no coinciden con su línea cronológica real. Estas discrepancias lo arrastran hacia una espiral de paranoia existencial, donde debe discernir si está presenciando destinos auténticos o manipulaciones orquestadas por la propia inteligencia artificial. La trama explora los límites de la autonomía personal frente a sistemas predictivos, cuestionando si el conocimiento anticipado del porvenir fortalece o anula la capacidad de elección humana. Mientras Aarón navega por este laberinto de realidades alternas, su relación con las personas que lo rodean se transforma en un juego de desconfianzas cruzadas y lecturas entre líneas. El conflicto central gira en torno a la veracidad de estas proyecciones digitales y su impacto en la psique humana, planteando si alguna decisión puede considerarse genuina cuando el futuro parece estar escrito en algoritmos..