Simon Says (2025)

En las sombras de la tradición infantil se esconde una verdad perturbadora que desafía la inocencia de los juegos de la infancia. La historia se sumerge en los orígenes olvidados de "Simón dice", revelando cómo lo que aparenta ser un simple pasatiempo infantil en realidad emerge de rituales ancestrales de control mental. El relato sigue a un grupo de investigadores que descubre manuscritos antiguos que detallan experimentos psicológicos realizados por una figura enigmática conocida como el Primer Simón, cuyo legado ha perdurado a través de los siglos transformado en aparente diversión infantil. La narrativa explora cómo los comandos aparentemente inocentes del juego ocultan patrones de manipulación psicológica diseñados para probar los límites de la obediencia humana. A medida que los personajes principales profundizan en su investigación, comienzan a experimentar fenómenos inquietantes donde la línea entre la realidad y el juego se desdibja peligrosamente. Cada "Simón dice" pronunciado en su entorno desencadena eventos inexplicables que reflejan los experimentos originales, arrastrándolos hacia una espiral de paranoia donde ya no pueden distinguir si actúan por voluntad propia o siguiendo órdenes invisibles. El suspense se intensifica cuando los investigadores descubren que el juego funciona como un portal hacia dimensiones donde las reglas de la realidad son maleables, y donde la figura de Simón ejerce un control absoluto. La ambientación combina escenarios cotidianos que gradualmente se distorsionan bajo la influencia de este fenómeno, creando una atmósfera de terror psicológico donde la obediencia ciega conduce a consecuencias aterradoras. El drama humano se desarrolla a través de personajes atrapados en este mecanismo ancestral, luchando por mantener su autonomía mientras enfrentan las siniestras implicaciones detrás de este juego aparentemente inocente que ha cautivado a generaciones..