No me abandones (2022)

Cuando Parker y Madeline adquieren la residencia victoriana que tanto anhelaban, creen haber materializado su fantasía conyugal. La propiedad, con sus torreones góticos y jardines descuidados, esconde entre las vigas del desván un cofre de caoba con correspondencia decadente. Las misivas, dirigidas al arquitecto original, revelan una obsesión romántica que traspasa los límites temporales, describiendo rituales de vinculación eterna mediante símbolos esotéricos tallados en la estructura misma de la vivienda. La pareja comienza a experimentar fenómenos inexplicables: sombras que reptan por los pasillos, susurros que emergen de las paredes durante la madrugada. Al profundizar en la correspondencia macabra, descubren que el anterior propietario practicaba ceremonias para evitar la separación corporal tras la muerte. Esta exploración de secretos ancestrales atrae a una figura femenina que merodea la propiedad al ocaso, cuyo rostro presenta inquietantes similitudes con las descripciones de las cartas centenarias. La misteriosa visitante demuestra conocimiento arquitectónico imposible sobre los pasadizos ocultos y las marcas rituales en los cimientos. Su llegada desencadena una sucesión de eventos sobrenaturales donde los límites entre la realidad y la pesadilla se difuminan. La investigación sobre rituales de vinculación eterna se vuelve una carrera contra el tiempo, mientras la presencia spectral manifiesta una posesividad creciente hacia Parker, reproduciendo los patrones de obsesión documentados en la correspondencia antigua. La pareja deberá resolver el misterio de las ceremonias ancestrales antes que la entidad consuma el ciclo que comenzó siglos atrás, en un enfrentamiento donde el amor eterno se revela como la más aterradora condena..